A menudo oigo la desesperación en tu voz cuando se trata de problemas de la colada. Te sientes como si fueras la única en el mundo con estos problemas. Pero, en realidad, nos pasan a muchas de nosotras.

Por eso, he pensado que hoy podría sugerirte 6 soluciones para los grandes problemas de la colada.

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1. ¿Cómo puedo mantener mi blancos blancos sin utilizar productos químicos agresivos?

Lo sé, es muy frustrante ver las toallas, los calcetines, las camisetas blancas etc. volverse amarillas... Es suficiente para hacerte agarrar la botella de lejía. Además de no querer que esta sustancia nociva llegue al medio ambiente, ¿sabías que el uso excesivo de lejía puede causar la misma coloración amarillenta?

Solución: 

• para mantener el blanco blanco, añadir 1/2 taza de sal gorda cuando pones la próxima lavadora; también ayuda para fijar y mantener los colores en los tejidos.
• para recuperar el blanco, usar blanqueador como el de Jacques Briochin de nuestra tienda, que es mucho más suave con la ropa y el medio ambiente.
• para eliminar la coloración amarilla en la zona de la axila de las camisas, hacer una pasta de peróxido de hidrógeno (agua oxigenada) y bicarbonato de sodio, y aplicarla en la mancha con un cepillo de dientes. Dejar que se siente durante la noche, luego enjuagar y lavar la camisa como de costumbre.

2. Detergente para la ropa: ¿uso demasiado, o demasiado poco?

Por alguna razón, la gente se preocupa por este tema. Mi consejo es que no lo pienses demasiado. Si tienes una lavadora de carga frontal, simplemente pon la ropa dentro, cierra la puerta y usa la ventana de la puerta como guía. Si la colada está apilada hasta la mitad de la ventana, entonces tienes una carga media. Si está hasta arriba, es una carga. No la llenes demasiado. La ropa necesita espacio para lavarse bien.

Ahora lea bien la etiqueta y echa la cantidad exacta que se te indica ahí. Pensamos que más detergente (de lo indicado) significa ropa más limpia, pero en realidad no es para nada así. Todo el detergente que echamos de más se queda como residuo en los tejidos y entra luego en contacto con nuestra piel. 

También te sugiero detergentes más concentrados, la diferencia entre una marca que te indica echar 90 ml y otra que te indica echar 30, es la cantidad de agua que hayan elegido usar en el producto. Si es que queremos ahorrar este recurso tan valiosos, mejor elegir un detergente más concentrado.

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3. Mis toallas han cogido un olor rarito

Las toallas son notorias para este problema, y es fácil ver por qué. A menudo las dejamos arrugadas y mojados durante largos periodos de tiempo. Llenamos demasiado la lavadora y no se lavan correctamente. En ambientes húmedos, como en las casas de la playa o los mismos baños, simplemente no tienen las condiciones necesarias para un secado perfecto. ¡Pero no tires esas toallas todavía! Hay esperanza para salvarlos y restaurar su tacto esponjoso.

Solución:
Lavarlos en la lavadora dos veces, poniendo vinagre blanco en todos los compartimentos de dosificación de detergente de la lavadora: el blanqueador, el detergente y el suavizante. La temperatura no importa aquí. Puedes elegir lavar e frío tus toallas de playa coloridas, y en caliente (o lo que quieras) para tus toallas de baño blancas. Secarlas como de costumbre, o incluso mejor colgarlas afuera en un día soleado.

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4. Quiero desecharme del suavizante para la ropa, pero quiero mantener esa sensación suave y esponjosa de mis prendas...

I hear you, sister! Pero es prudente querer dejar de usar suavizante, por lo menos olvídate de los comerciales. Depositan películas cerosas y otros residuos químicos en tu ropa. Un vaso de vinagre hace maravillas.

Es un producto químico totalmente innecesario, un elemento de basura real, que se libera en el medio ambiente. He añadido una taza de vinagre blanco a mi ropa en lugar de suavizante durante años y nunca he mirado atrás! Y no te preocupes por el olor a vinagre — no sólo el olor se elimina completamente, pero también neutraliza cualquier otro olor.

Pero en caso de que le tienes mucho apego, o vives en una zona con agua tan dura que no lo vez posible (por lo menos, no ahora), te invito a conocer el Suavizante Lavanda de Jacques Briochin o si prefieres uno aún más suave, sin aroma, te recomiendo el Suavizante SIN AROMA de ECO-MAX

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5. ¿Dónde se van mis calcetines?

Si estás harta de no encontrar los calcetines cuando tiendes la ropa o si tienes una de esas infames secadoras que se comen los calcetines, te encantará esta solución.
¿Conoces esas bolsas de malla que usas habitualmente para lavar prendas delicadas? Asigna una a cada miembro de tu familia. Cuando llega el momento de poner una carga de ropa, solo hay que colocar todos los calcetines en la bolsa de cada persona, lavar y secar como de costumbre. Los calcetines quedan limpios sin tener que separarse.

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6. Siento que mi ropa no ha estado saliendo limpia últimamente

Hay una serie de causas para esa suciedad que a veces comienza a plagar tu ropa, así que en vez de darte una sola solución, te ayudaré a solucionar los problemas.

En primer lugar, quieres asegurarte de que tu lavadora está limpia. No se puede conseguir ropa limpia en una lavadora sucia. Añade aproximadamente 2 tazas de bicarbonato de soda y con el tambor vacío ejecuta el ciclo de autolimpieza de tu máquina o si no tiene uno, solo un ciclo de agua caliente largo. A continuación, pon un segundo ciclo añadiendo 2 tazas de vinagre blanco y 10 gotas de árbol de té o aceite esencial de lavanda. El aceite ayuda a combatir el moho y eliminar los depósitos minerales.

A continuación, humedecer un paño limpio con vinagre blanco y limpia el interior de la lavadora. No te olvides de la junta y de la puerta. Por último, limpia el interior del dispensador de detergente, utilizando un producto de limpieza (como por ejemplo el detergente para platos) y un cepillo de dientes, y frotar hasta dejarlo relimpio.

El problema principal es la mala dosificación del detergente para la ropa. Puede ser por echar demasiado o muy poco, o de usar el tipo incorrecto.

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Así que te invito que hagas un cambio en tu vida. Vamos a salir ganando todos. ¡Voy corriendo a la tienda! 

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